Almeria fue fundada por Abderramán III, califa de Córdoba, en el año 955 con el nombre de Al-mariyat cuya traducción literal es Espejo del mar. Su intención era servir de puesto de vigilancia estrategico, impidiendo la llegada sorpresiva de enemigos por la costa.
Gracias al poderoso ejercito -veinte mil soldados acantonados en Alcazaba, una fortaleza de cuarenta y tres mil metros cuadrados- estacionado en la zona, que brindaba una efectiva protección contra piratas y bandoleros tan típicos de la época, se desarrollo un importante comercio centrado basicamente en el intercambio de productos con Africa.
En 1147, Alfonso VII logro tomar la ciudad aunque esta fue reconquistada por los moros diez años después. En 1489, finalmente, los Reyes Católicos lograron recuperar Almeria e integrarla de manera definitiva a la corona española; sin embargo, un terremoto ocurrido en 1522 devasto la ciudad haciendo que la población quedara muy reducida, pasando de los miles de habitantes originales a ochocientas personas instaladas alrededor de la Catedral de Almeria.
Durante el siglo XVIII, se reanudo el comercio maritimo, reactivando la economía local. En esos años, ademas, se desarrollan mejores tecnicas de pesca y comienza la explotacion minera que tendra su auge en el siglo XIX.
Este exito comercial fomenta no solo el regreso de muchos de los habitantes que habian partido y la llegada de nuevos españoles deseosos de prosperar. Para cubrir las demandas de la nueva población se construyeron numerosos barrios y calles.
A lo largo del siglo XIX, la recuperación economica se ve ayudada y sostenida por las explotaciones mineras a lo que se suma la exportacion de uva y citricos. El éxito de estos emprendimientos, como en cualquier gran ciudad, se ve reflejado en construcciones mas ambiciosas, como la estación del ferrocarril, finalizada en 1893, y las reformas al puerto, a los que se agrega un vasto sistema de alcantarillado y agua potable y el trazado de nuevas calles.
El siglo XX, sin embargo, comienza con una recesión nacida de las crisis de los factores económicos (esencialmente, la mineria) que habian servido de sosten a la ciudad; sin embargo, con el paso del tiempo, la ciudad se recupera hasta convertirse en uno de los puntos mas importantes en todo lo relacionado con la explotación agraria europea gracias a sus cultivos de tomate y aceituna de mesa.
Además, explotando la benignidad de su clima y su posición privilegiada, Almeria a potenciado su atractivo turistico con numerosas ofertas hoteleras que ofrecen desde paseos por la historia cultural de la ciudad hasta visitas a las bellas playas locales a cuya tentación resulta dificil sustraerse.
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